Add parallel Print Page Options

que cada uno aprenda a controlar su propio cuerpo de una manera santa y respetuosa; que no se dejen llevar por los malos deseos, como hacen los paganos que no conocen a Dios, y que nadie le haga daño a su hermano ni se aproveche de él en este asunto. El Señor castiga todas estas cosas, como ya se lo habíamos dicho y advertido.

Read full chapter